Sobre libros, fotos y amor...
He pensado en libros, fotografía y amor, o simplemente en
el amor a los libros de fotografía.
Tengo obsesiones totales: me gustan las mujeres, las
hojas en que esté expuesta una idea poética, inteligente o intuitiva. Si a esta
combinación le agrego unas fotos es todo lo que requiere mi sistema autopoiético.
Pero, lamentable distracción, a veces la realidad nos
exige elegir, o es una o es otra. O eres artista o eres responsable de las
reflexiones que producen transformación (producir al modo en que Marx exponía
su teoría de la División Social del Trabajo).
En todo caso los maoístas intentaros resolver este dilema
de modo radical (y en realidad les fue mal) con su revolución cultural y la
gran marcha: todos debían ser antes que cualquier cosa campesinos u obreros. Si
querías escribir o pensar, debías cosechar, martillar, cargar.
Yo he sido trabajador desde bien chico, he sido en muchos
momentos productor y reproductor en el sistema capitalista, y desde hace
algunos años intento equilibrar esas cosas que los maoístas clásicos (que nada
tienen que ver con los chinos capitalistas de hoy) exigieron en etapas claras y
duras.
Ahora estoy disfrutando libros, la compañía de alguna
mujer dulce y saco fotos. Pero siempre vuelve el dilema: no puedo completar
todo en un bello libro de mujeres fotografiadas, con palabras suaves en las
bajadas de las imágenes.
Perfume…