Sin Obreros no hay Rumba

Matías, nuestro productor estrella, me llama hace unos días y me encarga una propuesta de ideas para una frase, una consigna, que intente sintetizar varios eventos y estados de ánimo en el marco de la celebración del día del trabajador, el 1º de mayo, la semana próxima. Sumando y restando, le tecleo algunas palabras, que finalmente quedan en lo que encabeza esta columna. La invitación será para el jueves 30 de abril, vísperas de la celebración en el mundo de un evento que sucedió hace casi cien años, la matanza de trabajadores anarquistas en la ciudad de Chicago, que exigían un trato digno a sus condiciones laborales. Coincidente con esa efeméride, en nuestro reducto va a tener una significación especial, Charly Pérez (el compañero Presidente honorario y vitalicio de nuestro mundo) quiere hacer un homenaje, un saludo a un grupo familiar, los Pagella, cuyo patriarca fallecido hace algunos meses, quiere reconocer el compromiso, de pronto indirecto, y que se canaliza en la posibilidad del continente sobre el que está sostenido Maestra. En una de las primeras crónicas que se enviaron para describir sobre nuestro mundo, se contó que la Maestra era la suma de tres espacios (una botillería, una bodega y un restorán y que justamente eso daba la fisonomía tan particular). Lo cierto es que con una paciencia infinita, don Renato Pagella arrendó todo este espacio para que a fines de los ochenta se construyera y funcionara el espacio que ustedes viven cada jornada. Los hechos son que Maestra ha transitado por diversos estados, administraciones varias, y criterios disímiles, que en algún momento produjeron una crisis de gestión en los noventa, y que por suerte fue revertida. En todo este tiempo, don Renato Pagella, en esa cosa que tienen los italianos de respeto y compromiso sumido en su palabra empeñada, ayudó a sobrevivir en aquel tiempo de dificultad, y el espacio que compartimos no cerrara.Charly tiene un gesto de gratitud y agradecimiento, que lo ha declarado desde siempre, con este personaje y ahora con su familia.Pero tiene una relación las celebraciones, el homenaje y el espacio. Una síntesis que se expresa en que finalmente centenares de personas han pasado laborando por las paredes místicas de la capital de la salsa, y han podido cumplir los más variados compromisos, proyectos y sueños, y quien les ha suministrado los recursos, con el empeño y esfuerzo de cada cual en la jornada de trabajo, ha sido la Maestra.Estudiantes (de ciencias sociales, pedagogía, ingeniería, medicina); dueñas de casa; meseros de oficio; obreros de construcción, etc., en los 21 años de vida. Ha sido esta combinación de miradas la que permite una relación tan particular entre trabajadores y rumberos. Muchos hemos sido los que no hubiésemos podido completar nuestros estudios, o hacer avanzar los proyectos de vida sin la ayuda de Maestra.Es por todo esto que la consigna es “Sin Obreros no hay Rumba”, como reminiscencia de las diversas calificaciones, contenido y sentido que puede tener ser un obrero, trabajador, operario, proletario, técnico, profesional, etc., y que quiere significar que este espacio es posible porque han existido obreros de la rumba, quienes han dejado las horas de descanso, han cambiado formas de vida y paradigmas, por estar siempre preparados, con las dificultades propias que provocan las relaciones humanas, pero con un compromiso a toda prueba por entregar el mejor lugar del mundo, un verdadero mundo, para disfrutar la Rumba de la vida…El jueves 30 no habrá clases de salsa, pues el evento partirá a las 21:00 hrs. con la presencia de varias generaciones de trabajadores que han pasado por Maestra. Carmen Prieto (la insigne bolerista que inició su camino justamente en nuestro escenario) saludará a la familia homenajeada y a los trabajadores de Maestra.

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